sábado, abril 22, 2006

Crash (Colisión)

Hola, aloh.
 

Mi cine preferido proyecta 'Crash (Colisión)' de Paul Haggis.

El gallinero cinematográfico está alterado. Paul Haggis tiene en su haber profesional haber sido guionista de muchas series de TV y, en especial, porque en su día yo la veía los fines de semana, el creador de la serie de TV 'Walker Texas Ranger' (1993), no precisamente un referente de creatividad narrativa y con un 'tufillo' ejemplarizante que, unido a la expresividad de Chuck Norris, dejaba tan 'KO' como las patadas y golpes que se repartían en pantalla. Con el guión de 'Million Dollar Baby' (2004, Clint Eastwood) vió la luz del reconocimiento pero no rascó Oscar a pesar de optar. Y en los premios Oscar de 2006 con 'Crash (Colisión)', (2004, Paul Haggis), ha dado la campanada llevándose, entre otros, el Oscar al mejor guión. ¡Anatema!, se desprende de los comentarios y críticas que se han vertido en los medios: el gallinero está alterado.

El guión de 'Crash (Colisión)' tiene fecha de 2001. No es una cuestión de oportunismo haberlo podido llevar a la pantalla a raíz de 'Million dollar baby', sino más bien una oportuna coincidencia dado que ambas películas son del mismo año (¿invirtió el dinero de 'Million dollar baby' en su proyecto?. Con certeza no lo sé pero hay preguntas que se responden al cerrar el interrogante, sobre todo cuando las fechas de estreno indican que 'Crash' estuvo completada meses antes de 'Million dollar baby'). Como acostumbra a ocurrirle a los guionistas que se meten a directores... las dudas de los productores son grandes y el guionista tiene que poner algo más que la idea y la dirección: Paul Haggis acabó rodando en su casa y, para algunas escenas, utilizó su coche.

El procesador deductivo del cronista se pone en marcha automáticamente: si el director utilizó su propio coche para rodar algunas escenas queda claro que la película no va de choques de coches. Efectivamente, quienes colisionan no son vehículos de cuatro ruedas sino elementos sociales de dos piernas, partículas elementales de la sociedad que evidencian la teoria expansionista del tenso universo post-11S complementada con situaciones propias de procesos termodinámicos: evolución de un sistema biosocial a presión constante, comportamiento de un entorno socio-cultural a temperatura constante. Vidas cruzadas de personajes que colisionan entre sí debido a alteraciones de presión, temperatura, cultura, intereses y etnia que, la termodinámica es así, acostumbran a conducir a procesos irreversibles.

"La previsión de unos es la magia de otros". La previsión de una hija al comprar una caja roja, no precisamente de bombones, consigue que el aumento de presión en la caldera mental del padre no vaya más allá de una violenta situación triangular que cada vértice interpretará salvada por azar, magia o religión. Las cosas no van a más porque todavía quedan elementos que posibilitan la estabilidad en particulares al borde de la ignición emocional derivada de la frustación, la tensión, la incomprensión o la marginación.

El guión establece una cadena de circunstancias, aparentemente circunstanciales, que repasan y explicitan el crispado ambiente que se vive en estos tiempos de publicitada liberación democrática. La caja roja, el tendero persa, el cerrajero hispano y la hija pequeña de éste conforman el núcleo emotivo de una trama, extensa pero nada dispersa, que teje una red de colisiones que aceleran el proceso de redención (debe haberla porque es una película americana) de unos pocos ('muchos serán los llamados pero pocos los elegidos', concepto tanto cristiano como capitalista sin que ello equivalga a una equivalencia).

Un guión de precisión relojera, con algunas imprecisiones que no afectan a la exactitud del mensaje indicado, delimita el tablero de billar en el que las imágenes darán vida al juego de emotivas carambolas, tanto visuales como argumentales. Desde el nocturno plano inicial en el que unas huellas de neumáticos en el arcén de una carretera pueden verse como las luces de una ciudad, pasando por el sencillo cuento del traspaso de la capa protectora a la pequeña de cinco años, siguiendo por las noches en el lavabo de quien tiene problemas de próstata y culminando en el plano del pasador de pelo rojo en la escena del disparo por parte de quien se quiere tomar la justicia por su mano (¡que por algo se compró una pistola!), resultan una película cuya baza principal estriba en eludir la compartimentación de las subtramas y mostrarnos que aunque pensemos que nos conocemos en realidad no tenemos ni idea de quienes somos: dado que somos nosotros y nuestras circunstancias, y como no estamos solos, cuando nuestra circunstancia cambia abruptamente nuestra reacción puede ser cualquiera menos la más conveniente para nuestra integridad. La vida sigue, es un hecho, pero no siempre con nosotros y nuestro San Cristóbal. Principio y fin de un universo en expansión, colisiones incluidas.

Un saludo desde el teclado.

miércoles, abril 19, 2006

Flores rotas

Hola, aloh.
 

Sesión de Cine Club en mi cine preferido de la mano de 'Flores rotas', de Jim Jarmush.

La sugestión, tanto como acción de sugerir como acción y efecto de sugestionar, llama a nuestra puerta sensorial y se abre camino hasta nuestro reducto emocional. Somos como somos pero en realidad somos como nos ven los demás. Matizo. En realidad hemos sido como nos han visto los demás. El presente es efímero en esta sociedad en continua evolución y perenne movimiento, por tanto, el pasado impone su importancia como el ancla que pretende mantener la posición del buque cuando éste detiene sus motores y el futuro es la gran incógnita que el tahúr que todos llevamos en nuestro interior intenta 'arreglar' para que sea lo más favorable posible.

Jarmush escribió el guión pensando en Bill Murray como protagonista. Cuentan que lo escribió en unas dos semanas y media. ¿Importa el tiempo?. Puede que sí o puede que no, pero lo que indudablemente importa es el número, la cifra, la cantidad, el tamaño. Por eso, para marcar importancia, hace 19 años cinco mujeres pasaron por la vida del protagonista quien, de paso, goza de buena memoria y, se deduce, gozaba de buena planta.

En un principio, el título del proyecto fue 'Flores muertas' pero, la experiencia es un grado, acabó en el matizado 'Flores rotas' que es más sugerente: la muerte es vía final, lo roto se puede arreglar. ¿Importan los matices?. Puede que sí o puede que no, depende de la sensibilidad de cada cual. Posiblemente hubiera sido mejor reclamo comercial una denominación final pero, puestos a no hacer concesiones al espectador, la independencia se mantiene con constancia matizada. De ahí la importancia del título y su relación con el ramo de flores rosas con el que el protagonista se persona ante la puerta de su pasado presente: una mujer, una flor. Un ramo de flores no deja de ser un conjunto de flores rotas, arrancadas de su jardín natal para formar parte de una ofrenda.

¿Importa el estilo?. Para el crítico puede que sí (en algo se ha de basar para justificar su argumentación). Para el espectador puede que no (las emociones no precisan estilo si bien requieren ser despertadas).

Planos largos, en duración y en ubicación de cámara, en cualquiera de sus combinaciones, caldean el ánimo del espectador y le sirven de punto de referencia visual sobre el que concentrarse para entrar en el trance visual que busca el director: "Nada de prisas. Relájate. Mira fíjamente la pantalla. Vamos a retroceder en el tiempo, a cuando fuimos como éramos". Los planos largos y la acción pausada discriminan a los estresados del móvil, interrumpen el sonido mascaburras de los comepalomitas y ejercen un poder hipnótico sobre quienes no han caido en brazos de morfeo. ¿Cómo reaccionarías, hombre o mujer, si llamasen a tu puerta y al abrir te encontraras con tu pasado roto hace 19 años?.

Junto con la hipnosis planificada, Jarmush juega con la sugerencia inducida verbal. Se nos dice que Don es un ligón (¿con esa cara?, ¿que ven las mujeres en él?) y que se ha hecho millonario (¿un ricachón que viste de chándal y va a comer a un tugurio de nombre hispano?). En fin, nos creemos lo que nos dicen y queremos creer. Más o menos lo que les ha ocurrido a Don y a sus mujeres. Hay un poco de todos nosotros, propio o de conocidos, en los personajes que van desfilando por la pantalla. Parece una película fría, distante, pero no deja de ser un espejo que devuelve la imagen de quien lo mira. Precisamente, el que no nos guste la imagen que nos devuelve el espejo sea uno de los motores del maquillaje consumista que vanaliza nuestro entorno.

Reflexión sobre el paso del tiempo y los sueños, sentimientos y personas que se quedaron en algún lugar de nuestro recorrido: somos como hemos sido. La solución no pasa por recuperar el pasado sino por encarar el futuro (reza el dicho popular: "es más factible hacer un niño que resucitar a un muerto") y el futuro viene de la mano de los jóvenes, no de la joven lolita (más de lo mismo conocido), ni del que lo mira desde el coche (¡qué malas vibraciones da sólo mirarlo!), puede que tampoco de quien Don quiere asignarse como hijo (va un poco perdido pero puede que encuentre su camino) sino de la juventud, femenina flor aún sin romper, que tiene sensibilidad para con sus semejantes y el entorno, como es el caso de la joven de la floristería que le cura la frente, personaje más significativo de lo que aparenta dado que se llama Sun Green, como la protagonista de 'Greendale', (2003, Neil Young), no ya como guiño al prolífico músico, y esporádico director, de quien Jarmush es amigo y fan y a quien rindió culto en 'Year of the horse' (1997, Jim Jarmush) sino como emblema de la juventud capaz de reconducir las cosas que están cayendo por su peso.

Cine crítico, aparentemente frío pero que refleja los múltiples matices de la realidad que, como demuestra la doble vuelta de cámara en torno al protagonista plantado cual estatua de rotonda en medio de la calle, sin trampa ni cartón, nos envuelve.

Un saludo desde el teclado.

jueves, abril 13, 2006

Salvaje (The wild)

Hola, hola.
 

Mi taquillera favorita me recibió con una sonrisa. Según parece, ahora se lleva el tinte canas, imitación del pelo canoso, y mi taquillera favorita no iba a quedarse al margen de la tendencia que se lleva. Por mi parte, obligado comentario referencial alabador de su nuevo aspecto visual mientras pensaba que quizá no es tan mala idea, así no hay que estar pendiente del espejo, a la caza visual de la cana visible. Si no puedes vencerles, úneteles.

Jueves santo, jueves de estreno. Semana santa, de jueves a lunes, mi cine preferido realiza su particular procesión llevando a cuestas el estreno de 'Salvaje', de Steve "Spaz" Williams. El Jefe ha marcado el paso y los demás siguen su dictado. Ahora, falta que el público se apunte también.

Disney vuelve desde el más allá en este año 2006, prometiéndoselo prometedor. En animación había venido de la mano de Pixar bajo un marco contractual que marcaba el fin del acuerdo con el próximo estreno de 'Coches', inicialmente previsto para 2005 pero que cuestiones quizá más palaciegas que de producción animada lo han llevado hasta algún instante de lo que queda de año. Los estrategas de Disney han jugado sus cartas en busca del órdago.

Fase 1: Si no puedes vencerles, cómpralos

 

La noticia aparecía en la prensa el pasado mes de enero...

Me temo que se acabó el buen rollo Pixar. Ahora, desde la órbita Disney no espero grandes acontecimientos. Ojalá me equivoque.

Al margen de la noticia, me extraña que Disney compre por 6.000 millones una productora que ha rendido hasta la fecha 2.600 millones. Sospecho que una de las dos cantidades no es correcta.

Disney compra la productora de animación Pixar por 6.065 millones

Los estudios Walt Disney llegaron ayer a un acuerdo para comprar la productora de películas de animación Pixar por 7.400 millones de dólares (6.065 millones de euros). Pixar ha producido éxitos internacionales como Toy Story, Buscando a Nemo, Monstruos SA y Los Increíbles.

La transacción, que se realizará mediante un canje de acciones, convierte al consejero delegado de Pixar y cofundador de la firma de ordenadores Apple, Steve Jobs, en el mayor accionista individual de Walt Disney, compañía en la que puede ocupar el cargo de vicepresidente.

Disney confía en recuperar con esta adquisición el liderazgo que tuvo durante décadas en la industria cinematográfica de animación, pero que ha ido perdiendo progresivamente conforme ha avanzado el empleo de la tecnología y la animación digital.

La alianza que desde 1995 une a Disney y a Pixar sigue dando sus frutos, como el próximo estreno en junio de Cars, el último eslabón de una larga cadena de éxitos. Las seis películas hechas entre ambas productoras han recaudado en torno a 2.600 millones de euros. Todas ellas han quedado grabadas en la mente de las nuevas generaciones, de la misma forma que lo hicieron hace varias décadas clásicos como La Cenicienta, Dumbo o Bambi.

"La animación es y será el alma y el corazón de Disney", prometió su presidente, Bob Iger, el pasado noviembre. Desde entonces persiguió el acuerdo con Pixar, compañía adquirida por el polifacético Jobs en 1986 por sólo 10 millones de dólares.

(Noticia publicada en la página 74 de la edición de 25/1/2006 de El Periódico - edición impresa)

Fase 2: Si lo quieres a tu gusto, no lo encargues, hazlo

En el mundo cinematográfico hay más artistas de lo que los productores desearían. El artista está por su obra mientras que el productor está por la taquilla. Así que lo mejor es que el productor se meta a artista.

Es fácil. Se consultan las películas más taquilleras de los últimos años, se toma lo mejor de ellas y se hace mejor.

'Buscando a Nemo': Un padre buscando a su retoño durante toda la película. ¡Venga!. Y además, haremos que el padre tenga un pasado. Drama familiar que esto es Disney.

'Madagascar': Cuatro animales de zoo, león en cabeza, en busca de un compañero de reclusión consiguieron destronar del primer puesto en las taquillas estadounidenses al último episodio de 'Star Wars'. ¡Venga!. Y además, haremos que el desaparecido sea el retoño del león, más es mejor. Por cierto, ¿en 'Madagascar' había unos pingüinos que metían bulla?. Pues aquí no vamos a ser menos, también habrán pingüinos.

'Ice Age 2: El deshielo': Animación independiente para cada pelo de animal. ¡Venga!. Y además, pondremos unos fondos que se cagará la burra. Por cierto, ¿no había una ardilla que armaba barullo?. Pues también habrá una ardilla. Pero aquella ardilla era independiente. De eso de ir a su bola nada, aquí todos a una, en familia.

Bien ya están trazadas las líneas maestras. ¿Qué tal pinta?

¡Caramba!, parece algo realmente salvaje.

Pues ya tenemos el título. Ya tardamos.

¡Dios mío!, pensé mientras veía subir a mi taquillera favorita hacia donde me encontraba sentado. Esto no le va a gustar. Yo ya estoy aburrido y falta más de la mitad de la película todavía. Juntos, unidos, en familia, aguantamos el chaparrón estoicamente.

¿Dónde está la gracia del koala?.

El dibujo tumba de espaldas pero la trama es un golpe bajo que deja sin aire.

Parece una película 'pizza', sobre una base de pasta se han ido espolvoreando ingredientes y condimentos de calidad probada, el maestro pizzero lleva en los efecto visuales de ILM (Industrial Light & Magic, la división de efectos visuales de George Lucas) desde 1989 pero vistos los resultados me vienen a la mente el dicho económico de que 'beneficios pasados no garantizan resultados futuros' y el dicho industrial 'óptimos locales no suponen óptimos globales'. No obstante, la taquilla no se rige por dichos sino por hechos y desde aquí no alcanzo a ver los resultados económicos. Quizá por eso estoy aquí escribiendo en vez de estar en el mundillo de la producción cinematográfica. La cruda realidad del cronista.

Lo que realmente es salvaje es la lucha que las producciones animadas mantienen por la taquilla, sin cortapisas, estilo drácula, directamente al cuello de las fuentes de inspiración.

AñoPixar DreamWorks Disney
1995Toy Story --- ---
1998A Bug's Life Antz ---
1999Toy Story 2 --- ---
2000--- Chicken Run ---
2001Monsters, Inc. Shrek ---
2003Finding Nemo --- ---
2004The Incredibles Shrek 2
Shark Tale
---
2005--- Madagascar
W&G:La maldición...
---
2006--- --- Salvaje
Cronología de las producciones
Pixar DreamWorks Disney
A Bug's Life (1998) Antz (1998) ---
Monsters, Inc. (2001) Shrek (2001) ---
Finding Nemo (2003) Shark Tale (2004) Salvaje (2006)
--- Madagascar (2005) Salvaje (2006)
Similitud, temática o argumental, de las producciones

Al acabar la película, mientras desfilaban por pantalla los créditos de todos quienes habían participado, mi taquillera favorita comentó: "Me gustó más la del deshielo, tenía más gracia". Nada más puedo añadir.

Poco antes de apagarse la pantalla, con el último crédito, se oye la voz del koala instando a salir de la sala. ¿Dónde está la gracia del koala?. ¿Soy víctima de una mutación humorística?. ¿El resfriado que he pasado me ha embotado los sentidos y me ha impedido saborear la película?. ¡Basta!. ¿Vienes a ver una película de animación y sales preocupado porque no te ha gustado?. Pues no le des más vueltas, ha sido la película.

Un saludo desde el teclado.

viernes, abril 07, 2006

Tirante el Blanco

Hola, aloh.
 

"Comandaments tecnics operatius contactin amb el CSM" (*1*) salió de los altavoces del andén del metro de la línea 4 mientras esperaba la llegada del convoy que me debía llevar a mi cita laboral matutina. Ya no es cuestión de saber idiomas, condición necesaria pero no suficiente que dicen los matemáticos, además hay que disponer de la suficiente capacidad de digestión conceptual para asimilar la maraña de denominaciones y siglas con que los parlantes, catalanes y castellanos por señalar aborígenes lingüisticos próximos con diccionario de referencia, adornan y condimentan sus emisiones verbales si no se quiere que el mensaje se vaya patas abajo tal como entró por el conducto auditivo. ¿Qué hubiera pasado si el mensaje emitido hubiese sido: 'CC.TT.OO contactin amb el CSM'?. Más corto, otra tendencia actual del lenguaje, pero quizá más complicado de decir por quien lo emitía y sin garantías de comprensión por los receptores destinatarios (riesgo de entender CC.OO. y entonces en el CSM, a saber qué es y dónde se encuentra, hubiesen aparecido los enlaces sindicales del metro en vez de los mandos técnicos operativos).

Por si la complicación idiomática comunicativa no fuese suficiente vivimos también tiempos de irascencia idiomática política, escudada tras palabrería estatutaria y de unidad nacional, y escampada por los aires por obra y gracia de los medios de comunicación de masas (dinosaurios, mamuts, elefantes, señoras y señores, diputados y senadores).

Por si éramos pocos en el fregado de la comunicación, nos encontramos en plena resaca de una disputa internacional sobre la libertad de expresión, fogata pre-sanjuanera alimentada por opiniones y comentarios de todo el que ha tenido tiza, pizarra y tiempo para decir la suya al respecto de unas caricaturas publicadas hacía meses, una cortina de humo que ha operado el fundido de transición hacia la presente cuestión nuclear iraní.

Que los ánimos están animados no cabe duda. Signo uno, ha nacido Cristal Rojo, emblema neutral para servicios de emergencia mundial que permitirá que la Estrella Roja de David se incorpore finalmente al movimiento internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, una decisión que se tomará formalmente en una reunión extraordinaria que se celebrará en mayo próximo en Ginebra. Signo dos, mientras llega mayo y para ir calentando motores, ha subido el petróleo, una vez más ha alcanzado precios históricos, historia considerada informativamente como período de tiempo de semanas por no decir de un día para otro, ante las perspectivas de un ataque militar a Irán.

En medio de este sarao Vicente Aranda (Barcelona, 9-Nov-1926), a siete meses de su ochenta aniversario, ha estrenado 'Tirante el Blanco', adaptación cinematográfica de la novela 'Tirant lo Blanc' (*2*) (1490, Joanot Martorell) que utiliza como reclamo la coletilla: "En un mundo en guerra, el arma más poderosa es la virginidad de una princesa". Dice el refrán que "más sabe el diablo por viejo que por diablo", así que... oído, Vicente: apliquemosnos el emplasto porque a las puertas de un nuevo capítulo de guerra liberadora y con un arma poderosa de difícil consecución, el chaparrón está asegurado.

El Jefe, por su parte y dentro de la campaña de primicias de mi cine preferido, se ha apuntado al estreno de la película y no sin sufrir los chapoteos derivados de la crispada situación politico-lingüistica que corre por nuestros lares pues me comentaba los problemas de distribución que, sólo los carteles, planteaban al haber tres grupos: título original (Tirant lo Blanc) y créditos en catalán, título original y créditos en español, y título y créditos en español. Cultura y política, aceite y agua.

Mi taquillera favorita, mano sobre mano dada la poca afluencia de espectadores la noche del estreno, me miraba resignada para no mirar el contador del dispensador de entradas que aún le quedaban por vender tan sólo para cubrir los gastos del día. Intenté animarla comentándole que la programación del cine aparecía en la agenda cultural, además de en portada, de la página web de nuestro ayuntamiento. "¿Y quien mira esa página?", me preguntó. "Pues, por de pronto, yo", respondí. "Estamos apañados", remató, acompañando sus palabras con un golpecito compactador de las monedas que había empaquetado. En esas llegó un cargo municipal con su mujer e hija. Se saludaron y mientras recogía el cambio, el hombre preguntó qué tal estaba la película. Mi taquillera favorita respondió que aún no la había visto, que la vería en esa sesión al cerrar la taquilla, pero que le habían informado de que hacia el final había una escena un tanto escabrosa. "¿Qué edad tiene su hija?", preguntó (hay que preguntar porque los hijos púberes aconstumbran a estar a la altura de los padres). "Ha cumplido los dieciséis", respondió el padre. "Bueno, no habrá problema, a esa edad hoy en día ya saben de todo", comentó mi taquillera favorita. "¡Y que lo diga!, somos nosotros, los padres, quienes no sabemos muchas cosas", correspondió el padre a modo de despedida. "¿Hablábais de mi?", alcancé a oír que la hija le preguntaba al padre cuando éste se acercó con las entradas, si bien, hasta dónde alcanzó mi oído, obtuvo un silencio administrativo como respuesta a su cuestión.

Reconozco no haber leído la novela original pero a raíz de la discrepancia que encuentro entre la imagen del cartel y el hilo conductor de la película me animo a vaticinar que se trata de una adaptación libremente cinematográfica de la tercera parte: Tirante en el Imperio Griego. Respetando la libertad interpretativa del director para con la historia que cuenta, reconociendo la detallada ambientación conseguida, tanto de decorados como de vestuario (huele a Goya que tira de espaldas), admirado por la resolución 'más artística que digital' de las escenas de batalla (punto de atranque de esta costosa producción a causa de los problemas de trucaje digital de los combates) no conseguí superar la distancia que mediaba entre mi puesto de espectador en la sala y la pantalla, foso de castillo que completó su excavación en el momento en que la Viuda Reposada se levanta la falda ante Tirante a modo de tentadora propuesta alternativa y se llenó a rebosar de agua con las desconvencidas voces femeninas que gritaban 'negro', 'perro' y 'moro' referidas al Gran Turco, las dos horas de película, los líos de escenas entre lo que soñado y lo acaecido, el montaje digital de los sueños de montaje psíquico de la princesa, el poco espíritu del protagonista, tanta actriz desperdiciada para el texto o para la vista, fueron algunos de los cocodrilos que tomaron el foso como habitat y me desanimaron a zambullirme para salvar a nado (ya que el puente que tendía el director no me infundía confianza de consistencia y amenazaba con ceder a mi peso, a mi paso) el foso que impedía mi entrada en el prometido castillo de emociones y pasiones que, a todo cinemascope, se promocionaba desde la pantalla.

"Gallina vieja siempre hace buen caldo", resume la salvada de película que supone la escena en que el quebrado Tirante deja por unos momentos su armadura de guerrero rey para convertirse en sensible agricultor que, arado en ristre sostenido, siembra semilla en su amada tierra. Escabrosa escena, según mi taquillera favorita, que me ayudó a entender la ironía encerrada tras el título de la obra original: Tirante, tanto por tensar como por tirar, y el blanco, por ser la clara alternativa cristiana al oscuro musulmán.

Aparte de la oportuna elección de este título para estos momentos turbulentos que soplan de bando a bando, sea río Ebro, sea Mar Mediterráneo, como epílogo, un mérito indiscutible que sale a la luz una vez acabado el filme: la habilidad de Vicente Aranda para conseguir productores para esta película.

Un saludo desde el teclado.

 

Notas

*1* Comandaments tecnics operatius contactin amb el CSM

Mandos técnicos operativos contacten con el 'CSM'.
Y hasta aquí puedo decir porque no sé quienes son, o qué hacen, los MM.TT.OO. y ni mucho menos el CSM pues no puedo ir más allá de sus iniciales. Un auditivo ejemplo de mensaje cifrado por contexto.

*2* Tirant Lo Blanc

Escrita a partir de 1460 y publicada por vez primera el 1490, Tirant lo Blanc es una novela de caballerías que narra las aventuras guerreras y amorosas de Tirant al servicio de un bello ideal: liberar el Imperio Griego, Constantinopla, del asedio de los turcos. Acertadamente calificada como de novela total (a la vez es de cavallería, cortesana, militar, erótica y, en cierto sentido, psicológica), se distancia de las novelas de cavallerías de la Edad Media y su trama variada y rica en registros (desde el tono grave hasta el humorístico, desde la crueldad hasta la sensualidad) la hacen una lectura placentera y divertida que le ha permitido resistir el paso del tiempo. Es, sin duda, una de las mejores novelas europeas de su momento.

Más detalles, información y edición en línea, en la página web
www.tinet.org/bdt/tirant/